Aunque no te des cuenta, las frutas están presentes en muchas de tus comidas diarias, por ejemplo: el cereal del desayuno, el jugo o zumo del almuerzo, el helado que compartes con tus amigos o con tu pareja, el dulce de la mermelada y hasta en el postre de cumpleaños.
Las frutas son alimentos ricos en sabores, colores y texturas que despiertan el gusto en cualquier persona, además, su consumo es benéfico para la salud, pues aportan vitaminas, minerales y antioxidantes que eliminan toxinas y mantienen jóvenes las células, ayudando así a regular el correcto funcionamiento de nuestro cuerpo.
Pero debes saber que las frutas antes de llegar a tu mesa, deben superar todo tipo de obstáculos que van desde enfermedades hasta una plaga bastante temible; se trata de un insecto volador conocido cómo la mosca de la fruta, este díptero es el responsable de que las frutas a veces aparezcan con gusanos, presenten manchas cafés o amarillas en sus cáscaras. Te puede interesar: Uvas y vino, placeres en peligro por la polilla de la vid
Estas afectaciones aparecen porque la mosca hembra pone sus huevos al interior de los frutos para que las larvas se alimenten de la pulpa o de las semillas de la fruta, lo cual ocasiona su pérdida de valor comercial, pudrición o caída prematura. Además, la picadura causada por la hembra para poner los huevos representa una vía de entrada para otros organismos que contribuyen al deterioro del fruto.
Salvando las frutas
Es por esto que los agricultores han puesto en práctica diversos mecanismos para controlar la mosca de la fruta. Un ejemplo de ello, es el control físico donde se recogen los frutos caídos para que no se formen pupas de la plaga en el piso, además de otros cuidados como tratamiento con trampas de colores y control químico con asesoría de un experto. Te puede interesar: Así son los plaguicidas
De no ser por estos cuidados, la humanidad podría quedarse sin frutas, y créenos que no exageramos, pues en el mundo hay cerca de 5.000 especies de moscas de fruta. Sin embargo, la más peligrosa es la Ceratitis Capitata, esta mosca afecta los frutos más comunes como peras, manzanas, uvas, además de frutas tropicales como mangos, papayas, aguacates, bananos y frutas cítricas o ácidas como naranjas, limones entre otros.
Con esta plaga no sólo pierden los países fruticultores, quienes cada año ven amenazados sus cultivos con pérdidas productivas de hasta un 50%, lo cual se traduce en pérdidas de más de 100 millones de dólares, sino que también perdemos todos como consumidores. Te puede interesar: Porqué podría desaparecer las naranjas
Pese a que todas las frutas cuentan con propiedades antioxidantes, aquí te presentamos algunas poco tradicionales para que te animes a consumirlas.